martes, 17 de noviembre de 2015

Visita a Chechaouen. 3º ESO

El martes, estuvimos de excursión en la ciudad marroquí “Chaouen”. A las 7 de la mañana estábamos todos en pie listos para viajar en autobús hasta el lugar. En la ida, todos estuvimos casi dormidos y cada cual con sus cascos escuchando música. Cuando llegamos, visitamos en primer lugar una fuente famosa allí que nos dijeron que lavaban la ropa. Dimos un paseo por la zona en la que estábamos, de paisaje rocoso y natural. Luego llegamos a la medina antigua donde gozamos de un poco de libertad para realizar algunas compras. Sobre todo, compramos pulseras de cuero y collares.
Ahí comimos por segunda vez, y entramos en un jardín precioso. Era de extensión inmensa, y había cientos de arbustos y flores muy bien cuidadas. Como no, nos hicimos tantas fotos como pudimos y pasamos a entrar a cada una de las distintas instalaciones que había alrededor. Un castillo, que desde
lo alto se podía ver todo Chaouen. Una antigua celda de presos que hasta incluía las viejas esposas atadas a una pared. Y, un edificio con más de 4 escaleras que todas llevaban a la misma planta superior.
Después, volvimos a montarnos en el autobús para llegar a un lugar diferente. En su totalidad era un extenso valle con la parte baja muy rocosa.
Entre las rocas algunos se sentaron para hablar, y otros preferimos subir a lo alto del valle para sentarnos o visitar el mirador. Tal tranquilidad alcanzamos entre aquella vegetación que nos supo mal cuando tuvimos que volver, y montarnos en el autobús destino a Tetuán.                                                         Noa Amazouz





Ahlam Hacini.

El 17 de noviembre los alumnos de 3 de la ESO fuimos de excursión a la ciudad de Chaouen acompañados de dos profesores. Nos sentamos en un café y pudimos contemplar unas vistas muy bonitas, y pasearnos por la medina. La ciudad es preciosa y muy tradicional, pudimos vestirnos de jebliat y hacernos fotos, comprar pendientes, sombras de ojos de muchos colores, llaveros, pulseras y bolsos de cuero, hacernos tatuajes o dibujos con henna, visitar la alqasaba, subirnos en las torres y pasearnos tranquilamente recorriendo las pequeñas callejuelas. Lo mejor fue que nos sentimos libres, autoritarios y responsables, pudimos recorrer gran parte de la medina nosotros solos acompañados de algunos amigos, buscando y preguntando por tiendecitas para llevarnos un             
recuerdo de este día tan especial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario